Entrevista a Aurora Diana Leire Darby de los Lobos

¡¡Hola, lectores!!

¿Recordáis que por los 100 seguidores dijimos que haríamos una entrevista a nuestras protagonistas? ¡Pues aquí está! Porque la mejor forma de conocer a un personaje no es haciendo una descripción física o de la personalidad. La mejor forma es, directamente, verlo. Pero como ver a Aurora ya podréis hacerlo durante los capítulos, Rush y yo hemos ideado una escena (que podría o no haber ocurrido) localizada temporalmente unos días antes de que la historia de "La Aurora de los lobos" comience.

Aquí comparto con vosotros, además, mi dibujo de Aurora. No soy pintora ni nada por el estilo y no considero que se me dé especialmente bien... Pero me gusta 😊 y para una vez que me sale algo decente... ¿por qué no compartirlo?

Podéis apreciar las características físicas de Aurora a partir del dibujo: pelirroja, pelo liso... Y también podríais haber deducido, si no lo supierais ya, que Aurora es una princesa.

Con respecto a que sea una princesa, para los que seáis anti princesas, no os preocupéis. En la entrevista siguiente observaréis en Aurora comportamientos muy típicos de princesa, pero eso se debe a que todavía no ha vivido todo lo que se le avecina. No es una entrevista común y además hace referencia a detalles importantes en la historia (incluso podréis apreciar que al final tiene cierto carácter adivinatorio).

Antes de comenzar, quiero aclarar el título de la entrada. Durante la historia en ningún momento se alude al nombre completo de Aurora, pero hemos creído interesante que tuviese un nombre acorde a su posición social. La explicación ficticia y real de los nombres de Leire y Diana la leeréis a continuación. El apellido Darby, por otro lado, fue una broma entre Rush y yo. Resulta que en una de nuestras tardes de fantasía, le expliqué la Revolución Industrial porque tenía examen un par de días después. Y en medio de esta Revolución apareció Darby. No fue el que inventó el barco de vapor o el refinamiento del petróleo. No, Abraham Darby fue el que en 1709 transformó la hulla en coque; en mi libro de Historia no pone nada más acerca de él. Pero eso es lo que pasa cuando estudias con otra persona... corres el riesgo de quedarte con muchos detalles prescindibles. Aun así tampoco fue un detalle tan "prescindible" si su apellido se convirtió en el de Aurora, ¿no creéis?

El título "de los Lobos" es un título honorífico, que Aurora todavía no tiene pero en teoría llegará a tener (por eso no se hace referencia a él en la entrevista).

Y sin más dilación...

La entrevista más esperada del año por los amantes de "Princesas con estilo"; la entrevista a la princesa Aurora.

Era una tranquila mañana en aquel idílico reino en el que lobos y humanos convivían como iguales.

―¡Buenos días, lobos y humanos! ―exclamó una mujer a las puertas del castillo―. Soy Celia, y hoy, en “Princesas con estilo” entrevistaremos a nuestra querida princesa Aurora, quien todavía ignora lo que se le viene encima…

Miró con disimulo alrededor para asegurarse de que nadie la había oído y sacudió la cabeza.

―¡Bien! ¡Allá vamos, Aurora!

Cruzó el umbral de la puerta principal y se encontró con una segunda puerta custodiada por quince guardias.

―Esto ya se parece más a un castillo… ―murmuró por lo bajo.

―Identifíquese ―ordenó con tono severo uno de ellos, cerrándole el paso.

Celia los miró con cierto aire de superioridad y después esbozó una sonrisa amable un poco forzada.

―Soy Celia Wistelmious ―anunció con orgullo.

Los guardias no dieron muestras de reconocer su nombre.

―¡En efecto, soy la famosa reportera! Si os portáis bien, quizá os firme un autógrafo. 

Uno de los hombres alzó las cejas y la loba guardiana que había a su lado no reprimió un bostezo. Celia rebuscó entre sus pergaminos el que le daría la victoria frente aquellos ignorantes.

―¡Ajá! Aquí está… ―les mostró un pergamino con el sello real―. Vengo de “Princesas con estilo” para entrevistar a la mismísima princesa Aurora.

La expresión de los guardias cambió y se mostraron algo más cordiales, lo suficiente para prestarle a la periodista la atención que ella buscaba.

―Habernos enseñado antes el sello… ―comentó el guardia.

La loba se enderezó en su puesto y le abrió el camino.

―Una entrevista a la princesa Aurora, ¿eh? ―dijo al pasar Celia a su lado.

Cuando la periodista se hallaba ya lejos, en la inmensidad del castillo, la loba añadió:

―Creo que será interesante de ver…

Su compañero soltó una carcajada a su lado.

La princesa Aurora llegó rodeada de cuatro sirvientes a la acogedora salita escogida para la entrevista. Celia posó su taza de té sobre la mesa con toda la parsimonia de la que disponía. Se levantó y se volvió a sentar al mismo tiempo que la princesa. La sorprendió la delicadeza con la que se acomodó sobre el sofá dorado, ligera como una pluma. Después, pasaron varios minutos de silencio y movimiento de cucharillas hasta que Celia sonrió con profesionalidad y se aclaró la garganta.

―Buenos días, su Alteza, soy Celia Wistelmious, de “Princesas con estilo”. Lo cierto es que es la única princesa de nuestro reino… quiero decir princesa con título real de verdad… Como sabrá, quizá, las princesas que suelen aparecer en nuestros números son más bien princesas simbólicas, iconos de la moda o la cultura, o cualquier mujer o loba que de algún modo pueda considerarse princesa…

Celia consiguió dejar de hablar por unos momentos. Aurora la observaba con serenidad y la reportera dedujo que, como buena princesa que era, no la interrumpiría.

―Mejor empecemos por el principio ―decidió―. ¿Cuál es su nombre oficial, princesa?

Aurora se puso un poco nerviosa al ser consciente de que era su turno de hablar. Alzó la mirada con suavidad y dijo:

―El nombre con el que se refieren a mí en las ceremonias… ¿no? ―Celia asintió y Aurora, un poco ruborizada, respondió al fin―: Aurora Diana Leire Darby.

―Un nombre… interesante. ¿Y podría preguntar a qué se debe que sus padres lo escogieran?

La princesa sonrió al sentirse en un campo que controlaba bien.

―El nombre de Aurora se debe a la diosa, como no podía ser de otra forma. Hay quien dice que Ella se manifestó el día de mi nacimiento.

―¿Y su Majestad lo cree?

―Oh… yo… Nunca me he creído tan especial para la diosa… Lo que sí puedo decir es que es un orgullo llevar su nombre.

Celia tomó nota y comentó para sí misma:

―Como todas las niñas que se llaman Aurora, que no son pocas… ―sacudió la cabeza y continuó en voz más alta―. ¿Y los demás nombres?

―Diana y Leire* son en honor a los sueños cumplidos y los sueños por cumplir. Leire fue la hermana de la tatarabuela del abuelo de mi padre, que tenía un estrecho vínculo con los dioses menores y que incluso se afirmaba que había visto a Aurora. Por desgracia, falleció a temprana edad y no pudo heredar el trono. Se podría decir que por eso estoy yo aquí ―sonrió, después se sintió culpable por hacerlo y finalmente recuperó un aire de solemnidad―. Diana fue una conocida reina, antepasada directa mía. Reinó en una época difícil y con tensiones, pero consiguió que todos los ciudadanos se sintiesen apreciados, protegidos y como hermanos entre ellos. Diana es un poco posterior a Leire, pero en mi nombre está antes debido a…

La periodista posó con demasiada fuerza su taza de té sobre la mesa y cortó a la princesa tratando de no parecer descortés.

―Entonces Darby…

―Darby es el nombre de la familia ―la voz de Aurora era un poco temblorosa―. No lo usamos mucho, pero lleva generaciones y generaciones pasando de padres a hijos. No podría determinar su origen, aunque existen algunas teorías…

En esta ocasión, Aurora supo contenerse a tiempo para no decir más de lo que la reportera buscaba. Celia tomó más notas y, satisfecha, leyó lo que había escrito en uno de los pergaminos.

―Bueno, creo que ya podemos pasar a las preguntas más relacionadas con “Princesas con estilo” ―tras el asentimiento de la princesa, prosiguió―. ¿Cuánto suele tardar en arreglarse por las mañanas?

La pregunta pilló desprevenida a Aurora, que tuvo que pensar durante unos instantes.

―Depende… no es lo mismo prepararme para reunirme con mi mentor que hacerlo para asistir a alguna ceremonia o para acompañar a mis padres en sus reuniones de reyes.

―Veo, princesa, que no tiene tiempo para aburrirse. Entonces… hábleme de su primer amor.

―¿Mi primer… amor?

Creyó haberlo oído mal, pero la expresión de Celia era bastante clara, y Aurora, sorprendentemente, se echó a reír.

―El amor no es una de mis prioridades en estos momentos de mi vida.

Celia levantó las cejas con escepticismo.

―¿No tiene dieciséis años?

Aurora asintió, tratando de contener su carcajada para no arruinar sus modales.

―¿No ha habido nadie especial?

―Tampoco es que haya pensado mucho en eso…

―Entonces sí puede haber alguien ―trató de descubrir la reportera.

Aurora negó con una sonrisa.

―No me lo creo ―dijo Celia.

La princesa se encogió de hombros. La periodista suspiró y aprovechó para cambiar de tema.

―¿Qué podría decirme de la relación con sus padres?

―Que no cambiaría a mis padres por nada del mundo, son todo lo que yo misma querría ser ―contestó casi sin pensarlo.

―¿Nunca ha habido disputas…?

Aurora negó enérgicamente.

―Pero… ―Celia se rindió―. De acuerdo, vale. Entonces, ¿qué clase de modas sigue? ¿Las sigue todas aunque se pasen de absurdas?

―No suelo seguir “modas”.

―¿Se marca su propio estilo?

―Supongo que… sí.

Celia observó el vestido discreto de la princesa; se había esperado un atuendo ostentoso y vistoso.

―¿Y su libro preferido es…?

―Esa pregunta es difícil ―se rio Aurora.

La periodista la imitó, aunque la tranquilidad, ingenuidad y bondad de Aurora la estuviesen sacando de quicio.

―Pero habrá alguna historia que destaque entre las demás, siempre la hay.

―Dicho así… Me quedo con el “Romance eterno de Día y Noche” y el “Nacimiento de Aurora”.

Celia cogió otro pergamino y anotó: “apasionada extrema de los dioses”.

―Ahora sí que vamos con las preguntas difíciles, las preguntas propuestas por los lectores de “Princesas con estilo”.

Aurora no habló, pero su cara de sorpresa lo dijo todo.

―¿Cuál es su mayor temor, Aurora?

Un sirviente se acercó, sirvió té y se fue antes de que la princesa respondiese.

―Supongo que no estar a la altura de las expectativas…

―Y si le dijesen que mañana se va morir… ¿Qué…?

―¿Me voy a morir mañana? ―la interrumpió Aurora, por primera vez.

―Em… no necesariamente, es solo una pregunta hipotét…

―Tendría que avisar a mis padres… ―se levantó del sofá―. Siendo yo la siguiente en la línea de sucesión, habría que realizar varias reuniones para decidir cómo afrontar mi muerte…

―¿Es eso lo que le preocupa? ¿Sus padres y el trono?

En Aurora apareció un nuevo sentimiento, extraño pero potente; la determinación.

―También me preocupa el pueblo, al que no podré intentar siquiera proteger. Y mi hermano. Oh, Okami, ¿qué podría hacer para evitarte todo ese dolor…? ¿Me voy a morir, entonces? ¿De verdad?

Celia también se levantó, suspiró exasperada y trató de calmar a Aurora.

―No, no se va a morir…

―¿Y cómo puede estar tan segura?

La periodista puso un momento los ojos en blanco.

―¡Porque tiene que vivir para poder leer esta entrevista en “Princesas con estilo”! ―se le ocurrió.

Aurora no entendió muy bien el argumento que le daba, pero le bastó para tranquilizarse. Entonces se escucharon unas trompetas y de la mente de la princesa se esfumó toda preocupación por la entrevista.

―¡Hartswisle!

Se acercó a la ventana y estuvo a punto de saltar de emoción. Celia también se acercó, pero no vio al músico. Aurora la miró, sin poder contener sus deseos de escuchar la música del compositor, y Celia, cansada de la entrevista, de su trabajo y de su propia vida, sugirió:

―Podemos realizar las últimas preguntas de camino al patio…

La mirada de Aurora brilló y al abrir la puerta, unos sirvientes acompañaron a ambas mujeres. Aurora caminaba al ritmo de la música que ya empezaba a oírse. Celia anotó un último detalle de camino: “compositor preferido, sin duda, Hartswiskle”.

*Nota: Diana es el nombre de la protagonista del primer libro que escribí y Leire el de la protagonista de uno de los proyectos que Rush acabará algún día, porque es muy bueno.

¿Qué os ha parecido? ¿Os gustaría una entrevista un poco más avanzada la historia?

Gracias por leer y déjate llevar por la fantasía...